CÓMO REPARAR TUS MANOS SECAS, AGRIETADAS O MANCHADAS

Las manos son esa parte del cuerpo que usamos para casi todo, por lo que dicen mucho de nosotros.

Mantenerlas sanas y presentables nos ayuda a ofrecer una buena imagen de nosotros, así como a sentirnos mejor y más seguros.

Podría decirse que las manos son el reflejo del alma. Y muchas veces son las grandes olvidadas de nuestro cuerpo y la zona que más se resiente. Además, junto con el cuello, las manos son las partes de nuestro cuerpo que antes revelan nuestra edad. ¿Estás dispuesta a descuidarlas?

El paso del tiempo, el trabajo, el frío y la exposición continuada al sol son factores que influyen en la salud y aspecto de nuestra piel, especialmente de las manos, que pueden volverse más ásperas, con grietas, rojeces y/o manchas. Seguro que muchas veces podemos hacer más por ellas, como ponernos guantes cuando hace frío para prevenir las grietas o usar cremas para mantener su correcta hidratación.

No obstante, si ya es tarde para prevenir, no dudes en probar ésta fácil y rápida solución para tener unas manos más suaves, jóvenes y sin manchas.

 Es clave llevar una buena higiene

En un día normal, nos lavamos las manos cerca de tres veces, en estos días esta cifra puede multiplicarse por 5, pero ¿has pensado alguna vez si las secas correctamente?
Uno de los mayores enemigos de las manos es la humedad. Seguramente no lo sabías, pero si tras lavar tus manos no las secas del todo, estarás contribuyendo a que tu piel se agriete. Prueba a secar tus manos con suaves toquecitos hasta que se sequen por completo. Y por supuesto, tras secarlas, para un cuidado óptimo de la piel, puedes aplicar justo después tu crema de manos favorita.

¿Sabías que es muy importante exfoliar también tus manos?

Si quieres conseguir unas manos cuidadas y perfectas prueba a exfoliar tus manos una vez por semana. De esta forma lograrás eliminar las pieles muertas que se quedan sobre tu dermis y tus manos absorberán mejor las cremas que apliques.

Humecta tus manos a diario

Aunque parezca algo obvio, a menudo nos olvidamos de humectar esta parte del cuerpo. Piensa que todos los días, tus manos quedan expuestas sin ninguna protección a los rayos del sol, a la contaminación y a todos los agentes externos que entran en contacto con nuestras manos.

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